Análisis sobre el papel de los green bonds o bonos verdes en la Sostenibilidad y en los Objetivos de Desarrollo Sostenible

Abstract

Las graves consecuencias derivadas del cambio climático y de las desigualdades sociales que sufrimos en la actualidad, ponen en peligro nuestra sociedad tal y como la conocemos. Por esta razón, la comunidad internacional ha decidido actuar, y a medida que el año 2030 se acerca, también lo hace la revisión del cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos para la Agenda 2030. Dado que en la actualidad, ningún país ha obtenido aún una nota favorable en los 17 objetivos, éstos deben acelerar en su carrera personal hacia la sostenibilidad. No obstante, existen determinadas herramientas con gran potencial para fomentar e impulsar esta carrera sostenible, y una de ellas son los bonos verdes. Gracias a su versatilidad, fines medioambientales y gran capacidad para generar capital, este instrumento financiero se constituye como un vehículo idóneo para la transición hacia el cambio; razón por la cual, a día de hoy podemos afirmar que el mercado de los bonos verdes ha superado la meta del billón de dólares.

The severe consequences due to the climate change and social inequalities we are currently facing are threatening our society as we know it. For that reason, the international community has decided to act, and as the year 2030 approaches, so does the review of the compliance with the 17 Sustainable Development Goals set out in the 2030 Agenda. Taking into account that, as of today, no country has yet achieved a favorable score on all 17 objectives, they must accelerate in their personal race towards sustainability. However, there are certain tools with great potential to promote and boost this country-based sustainability race, and one of them is the green bond. Thanks to their versatility, environmental purposes and great capacity to generate capital, this financial instrument is an ideal vehicle for the transition towards change; reason why we can nowadays state that the green bond market has exceeded the one trillion dollars’ mark.