Xi Jinping’s policies in Xinjiang : An Analysis of China’s objectives

Abstract

Históricamente, Xinjiang ha sido siempre un territorio de gran importancia para los gobernantes de la región. Sin embargo, nunca han conseguido asegurar el control total del territorio y de sus gentes, los uigures musulmanes de habla turca, que tienen poco en común con la población mayoritaria de etnia han del país. La resistencia de los uigures al gobierno del Partido Comunista Chino ha provocado numerosos enfrentamientos e incidentes violentos en la región, causando malestar e inestabilidad en detrimento del Estado. La creciente importancia estratégica, económica, geopolítica e ideológica de Xinjiang para la República Popular China y su presidente, Xi Jinping, ha llevado a la adopción de un enfoque diferente hacia la zona. Bajo el poder consolidado de Xi Jinping, Xinjiang ha experimentado graves cambios que han llevado a su completa securitización y a sus gentes a un estado de vigilancia constante, detención y encarcelamiento masivos. Estas políticas, que violan los derechos humanos de los uigures y de otras minorías musulmanas, forman parte de un plan más amplio que Xi Jinping está decidido a llevar a cabo.

Xinjiang has always been a territory of major importance to the region’s rulers historically. However, they have never managed to secure complete control over the territory and its peoples, the Turkic-speaking, Muslim Uyghurs, who have little in common with the country's ethnic Han majority population. The Uyghur’s resistance to the Chinese Communist Party’s rule has resulted in numerous clashes and violent incidents in the region, causing unrest and instability to the state’s detriment. Xinjiang’s growing strategic, economic, geopolitical, and ideological importance to the People’s Republic of China and its president, Xi Jinping, has led to the adoption of a different approach towards the area. Under Xi Jinping’s consolidated power, Xinjiang has experienced severe changes that have led to its complete securitization and its peoples to a state of constant surveillance, mass detention and incarceration. The policies, violating the Uyghur and other Muslim minorities’ human rights, are part of a bigger plan which Xi Jinping is determined to realise.