Impacto de los efectos del COVID-19 sobre los niveles de contaminación de Barcelona.

Abstract

Cada año Barcelona presenta unos niveles de contaminación superiores a los recomendados por la OMS y la Unión Europea. Esta realidad se debe al alto nivel de tráfico rodado, a la presencia del puerto de Barcelona y a la actividad industrial de la ciudad. Debido a estos factores, durante los últimos años se han tomado medidas para mejorar la calidad del aire de la ciudad condal, pero ninguna ha tenido tanto efecto como el confinamiento impuesto como medida de prevención contra la expansión del Covid-19. Durante los dos meses que duró esta medida, los niveles de óxidos de nitrógeno y PM10 se redujeron a niveles históricos, conllevando un aumento proporcional en los niveles de O3. El objetivo de este trabajo ha sido analizar el impacto de las restricciones de movilidad durante el confinamiento en los niveles de NO, NO2, PM10 y O3, y compararlo con el impacto de otras variables seleccionadas que también influyen en la presencia de estos contaminantes, tales como variables climatológicas, los vientos del Sáhara, la combustión de biomasa, los días no laborables o la activación de la Zona de Bajas Emisiones. Para ello, se ha elaborado un modelo de regresión lineal múltiple que permite analizar el impacto de cada una de las variables en los niveles de cada contaminante en las distintas estaciones de calidad del aire de Barcelona. Se elaboró mapas de zonificación para estudiar aquellas zonas más sensibles ante los cambios de las distintas variables. Los resultados muestran el marcado impacto heterogéneo del confinamiento en el interior y en el exterior de la ciudad, destacando las disminuciones de óxidos de nitrógeno en los distritos más céntricos de la ciudad (disminución de un 71,88% en NO y 50,64% en NO2 frente a un 41,01% y a un 39,07% respectivamente en los distritos de la periferia), así como el limitado control que se tiene sobre la contaminación del PM10, el cual es especialmente sensible a la presencia de vientos del Sáhara y a la combustión de biomasa (presentan unos coeficientes en el modelo de 0,344 y 0,243 para el PM10) en mayor medida que al tráfico rodado (la ZBE presenta un coeficiente de -0,036 para este contaminante).

Every year Barcelona has pollution levels higher than those recommended by the WHO and the European Union. This is due to the high level of road traffic, the presence of the port of Barcelona and the city's industrial activity. Due to these factors, measures have been taken in recent years to improve air quality in Barcelona, but none have had as much effect as the confinement imposed as a preventive measure against the spread of Covid-19. During the two months that this measure lasted, the levels of nitrogen oxides and PM10 were reduced to historic levels, leading to a proportional increase in O3 levels. The aim of this work has been to analyse the impact of mobility restrictions during the confinement on the levels of NO, NO2, PM10 and O3, and to compare it with the impact of other selected variables that also influence the presence of these pollutants, such as climatological variables, Saharan winds, biomass combustion, non-working days or the activation of the Low Emission Zone. In order to do this, a multiple linear regression model has been developed to see the impact of each of the variables on the levels of each pollutant at the different air quality stations in Barcelona. Together with a numerical analysis to detect the most relevant variables, zoning maps have been drawn up to study those areas that are most sensitive to changes in the different variables. The results show the marked heterogeneous impact of confinement inside and outside the city, highlighting the decreases in nitrogen oxides in the interior, as well as the limited control over PM10 pollution, which is especially sensitive to the presence of Saharan winds and biomass combustion, to a greater extent than road traffic.