Efectos del contacto con la naturaleza sobre el bienestar psicológico. Causas evolutivas y culturales

Abstract

El crecimiento de las ciudades y del entorno urbano nos alejan poco a poco del medio natural y con ello de los beneficios que este supone. Envueltos en una constante lluvia de estímulos y un frenético funcionamiento, la cuidad saca a la luz la problemática actual respecto a la salud mental de la población. Los beneficios del entorno natural, su capacidad restaurativa y su posibilidad de disminuir la sintomatología de numerosos trastornos y enfermedades ya fue descubierto en parte miles de años atrás. Es ahora, a través del auge de la investigación en esta área y la llamada de atención que supone la afectada salud mental social, que pretendemos resaltar la relevancia que esta capacidad restaurativa del entorno natural supone sobre nuestro bienestar psicológico. Trastornos psicológicos tan relevantes y prevalentes como la ansiedad, la depresión y el TDAH se verán influenciados y beneficiados por el contacto con la naturaleza, siendo para todos ellos una posible forma de terapia que reduce significativamente su sintomatología. Bajo un legado histórico donde lo natural ha sido entendido como producto y objeto que explotar, inmerso dicho concepto en la ideología occidental y dicotómica del ideal cristiano, parecemos olvidar todo lo que la naturaleza ha supuesto durante siglos para nuestra evolución como especie y supone en nuestro momento actual para nuestro mantenimiento del bienestar psicológico. El vínculo hombre-naturaleza resulta esencial para nuestro correcto funcionamiento físico y psicológico y es a través del presente trabajo como pretendemos dar luz a dicho argumento recalcando así la interdependencia que supone dicha vinculación.

The growth of cities and the urban environment gradually distances us from the natural environment and the benefits that it entails. Wrapped in a constant rain of stimuli and a frenetic functioning, the city brings to light the current problems in relation to the mental health of the population. The benefits of the natural environment, its restorative capacity and its ability to reduce the symptoms of numerous disorders and illnesses were already discovered in part thousands of years ago. It is now, through the rise of research in this area and the call for attention that the affected social mental health supposes, which we intend to highlight the relevance that this restorative capacity of the natural environment supposes on our psychological well-being. Such relevant and prevalent psychological disorders as anxiety, depression and ADHD will be influenced and benefited through contact with nature, being for all of them a possible form of therapy that significantly reduces their symptoms. Under a historical legacy where the natural has been understood as a product and object to be exploited, this concept immersed in the Western and dichotomous ideology of the Christian ideal, we seem to forget everything that nature has meant for centuries for our evolution as a species and supposes in our current moment for our maintenance of psychological well-being. The man-nature bond is essential for our correct physical and psychological functioning and it is through this work that we intend to shed light on this argument, thus emphasizing the interdependence that this tie implies.