Mostrar el registro sencillo del ítem

dc.contributor.authorMartín Merchán, Javieres-ES
dc.date.accessioned2024-08-21T12:50:51Z
dc.date.available2024-08-21T12:50:51Z
dc.date.issued2024-01-21es_ES
dc.identifierhttps://theconversation.com/y-si-no-estamos-tan-divididos-la-falsa-polarizacion-215616es_ES
dc.identifier.urihttp://hdl.handle.net/11531/92019
dc.descriptionArtículo en Periódicoes_ES
dc.description.abstractEn los Estados Unidos de mediados de los 90 del pasado siglo, la batalla cultural entre demócratas y republicanos florecía con fuerza y copaba buena parte del debate público. Los primeros centraban su propuesta en la redistribución de la riqueza. A los segundos les preocupaba más el aparente declive de los valores tradicionales de la familia. La negatividad y la agresividad con que ambos partidos se referían a los candidatos rivales escalaba a pasos agigantados, y era frecuente asistir a desagradables discusiones sobre el aborto, el crimen y demás asuntos divisivos. Aquella coyuntura parece inofensiva a la luz de los estándares actuales de radicalización a uno y otro lado del Atlántico; no obstante, a principios del siglo XXI, no eran pocos los estadounidenses que temían el crecimiento casi inexorable de esa espiral descontrolada de batallas culturales. Sin embargo, en realidad, ni esa espiral estaba descontrolada, ni las batallas culturales estaban intensificándose.es-ES
dc.description.abstractIn the United States in the mid-1990s, the cultural battle between Democrats and Republicans was raging and dominated much of the public debate. The former focused their proposals on the redistribution of wealth. The latter were more concerned with the apparent decline of traditional family values. The negativity and aggressiveness with which both parties referred to rival candidates escalated by leaps and bounds, and it was common to see nasty discussions about abortion, crime and other divisive issues. That conjuncture seems harmless by today's standards of radicalisation on either side of the Atlantic, but in the early 21st century, more than a few Americans feared the almost inexorable growth of such spiralling culture battles. In reality, however, neither was the spiral out of control, nor were the culture battles escalating.en-GB
dc.format.mimetypeapplication/pdfes_ES
dc.language.isoes-ESes_ES
dc.rightsCreative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada Españaes_ES
dc.rights.urihttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/es/es_ES
dc.sourceDescripción: The Conversationes_ES
dc.title¿Y si no estamos tan divididos? La falsa polarizaciónes_ES
dc.typeinfo:eu-repo/semantics/contribuitionToPeriodicales_ES
dc.description.versioninfo:eu-repo/semantics/publishedVersiones_ES
dc.rights.holderes_ES
dc.rights.accessRightsinfo:eu-repo/semantics/openAccesses_ES
dc.keywordsEspaña, Estados Unidos, falsa polarización, percepciones, redes sociales.es-ES
dc.keywordsFalse polarisation, perceptions, social media, Spain, United States.en-GB


Ficheros en el ítem

Thumbnail

Este ítem aparece en la(s) siguiente(s) colección(ones)

  • Artículos
    Artículos de revista, capítulos de libro y contribuciones en congresos publicadas.

Mostrar el registro sencillo del ítem

Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada España
Excepto si se señala otra cosa, la licencia del ítem se describe como Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada España