El proceso canónico de nulidad: ratio y valoración a los 30 años de su entrada en vigor

Abstract

.Desde la experiencia de 30 años de aplicación del proceso de nulidad que diseñó el Código de 1983, desarrollado y completado por la instrucción Dignitas Connubii, el autor defiende que el proceso se relaciona directamente con los derechos fundamentales y con los bienes jurídicos a los que sirve; en el caso del proceso de nulidad, con el derecho a la tutela judicial efectiva y con el ius connubii, de ahí la necesidad de mantener su vigencia y de afirmar el servicio que ha hecho —y está llamado a hacer— a la verdad del matrimonio y de la familia. De acuerdo con ello, la tesis que el autor sostiene es la de seguir echando mano del proceso judicial, todo ello frente a las propuestas de «administralizarlo», esto es, de hacer que pase de la potestad judicial a la potestad administrativa. En lugar de modificar la naturaleza jurídica del proceso de nulidad, lo que se propone es mantener y perfeccionar las instituciones procesales, reconduciendo toda la dinámica procesal a criterios de «buen obrar», esto es, de un obrar según principios deontológicos. Por último, el autor desciende al estudio concreto de determinadas instituciones procesales, tal como son configuradas por el legislador en el Código de 1983, haciendo una valoración de alguna de ellas. Por ejemplo, se destaca la revalorización que hizo del Código de la figura de las partes (se suprimieron las limitaciones del ius impugnandi, y se otorgó valor a su declaración), la equiparación entre partes privadas y públicas, se logró un equilibrio entre celeridad y búsqueda de justicia-verdad, se mantuvo la colegialidad, la doble sentencia conforme, el mecanismo de la certeza moral… El estudio termina con algunas propuestas de iure condendo que permitan un mejor proveer en el desarrollo de los procesos.

. Drawing from 30 years of experience in applying the nullity process designed by the 1983 Code—developed and supplemented by the Dignitas Connubii instruction—the author argues that the process is directly related to fundamental rights and the legal goods it serves. In the case of the nullity process, this connection is particularly evident in the right to effective judicial protection and the ius connubii. Consequently, the author emphasizes the necessity of maintaining the validity of the judicial process and reaffirming the service it has rendered—and is called to continue rendering—to the truth of marriage and the family. In line with this, the central thesis defended by the author is the continued reliance on the judicial process, countering proposals to “administrativize” it—that is, to transfer it from judicial to administrative authority. Instead of altering the legal nature of the nullity process, the proposal is to maintain and refine procedural institutions by orienting the entire procedural dynamic toward criteria of “good practice,” meaning conduct guided by deontological principles. Finally, the author delves into the concrete study of certain procedural institutions as structured by the legislator in the 1983 Code, evaluating some of them. For example, he highlights the Code’s revaluation of the role of the parties (eliminating restrictions on the ius impugnandi and granting greater weight to their testimony), the equalization of private and public parties, the achieved balance between procedural speed and the pursuit of justice and truth, the preservation of collegiality, the requirement of a double conforming sentence, and the mechanism of moral certainty. The study concludes with some de iure condendo proposals aimed at improving the development of the procedural system.