Relationship between Atherogenic Dyslipidaemia and Lipid Triad with Different Scales of Overweight and Obesity in 418,343 Spanish Workers

Abstract

La obesidad induce alteraciones en la bioquímica lipídica, evolucionando hacia la aterogénesis dislipidémica, un factor crítico en el desarrollo de eventos cardiovasculares. Dos formas relevantes de anormalidades lipídicas son la dislipidemia aterogénica (DA) y la tríada lipídica (LT), que implican alteraciones en los niveles de triglicéridos, HDL-c y LDL-c. El objetivo de este estudio fue evaluar la relación de la DA y la LT aterogénicas con diferentes escalas de sobrepeso y obesidad. Realizamos un estudio transversal que incluyó a 418.343 trabajadores adultos españoles, reclutados a partir de evaluaciones de salud en el trabajo. La dislipidemia aterogénica se definió como niveles de triglicéridos ≥ 150 mg/dL, valores de HDL < 40 mg/dL en hombres y < 45 mg/dL en mujeres, y LDL normal. Además, si los niveles de LDL eran > 160 mg/dL, se consideró LT. Los sujetos afectados por DA y LT en el estudio exhibieron valores medios significativamente más altos que aquellos sin DA ni LT en todas las escalas relacionadas con sobrepeso, obesidad y grasa corporal estudiadas. VAI (índice de adiposidad visceral) fue el predictor más fuerte de DA (AUC = 0,934; IC del 95 %: 0,933 a 0,936) y LT (AUC = 0,926; IC del 95 %: 0,923 a 0,928). La dislipidemia aterogénica y la LT se correlacionan positivamente con diferentes escalas de sobrepeso y obesidad. Estudios adicionales deberían apuntar a identificar otros factores contribuyentes. Nuestros datos obtenidos podrían ser útiles para sentar las bases para futuros trabajos sobre DA y LT.

Obesity induces alterations in lipid biochemistry, evolving toward dyslipidaemia atherogenesis, a critical factor in the development of cardiovascular events. Two relevant forms of lipid abnormalities are atherogenic dyslipidaemia (AD) and lipid triad (LT), which involve alterations in triglyceride levels, HDL-c, and LDL-c. The aim of this study was to assess the linkage of atherogenic AD and LT with different scales of overweight and obesity. We carried out a cross-sectional study including 418,343 Spanish adult workers, recruited from workplace health assessments. Atherogenic dyslipidaemia was defined as triglyceride levels ≥ 150 mg/dL, HDL values < 40 mg/dL in men and <45 mg/dL in women, and normal LDL. Additionally, if LDL levels were >160 mg/dL, LT was considered. Subjects affected by AD and LT in the study exhibited significantly higher mean values than those without AD and LT in all overweight, obesity, and body fat related scales studied. VAI (visceral adiposity index) was the strongest predictor of AD (AUC = 0.934, 95% CI: 0.933 to 0.936) and LT (AUC = 0.926, 95% CI: 0.923 to 0.928). Atherogenic dyslipidaemia and LT positively correlate with different scales of overweight and obesity. Further studies should aim to identify other contributory factors. Our obtained data might be useful in laying the groundwork for future works on AD and LT.