Una mirada que transforma. Itinerarios bíblicos

Abstract

Este libro es una reflexión sobre la mirada de Dios y su poder para transformar nuestra percepción de nosotros mismos y del mundo. A través de narraciones y ejemplos de las Sagradas Escrituras, muestra cómo esta mirada puede ser un verdadero acto creativo, que nos va revelando facetas desconocidas de nuestra alma. En el Antiguo Testamento, la mirada de Dios es descrita como un elemento transformador, mientras que, en el Nuevo Testamento, se encarna en Jesús, reflejando amor y compasión. Los relatos bíblicos ilustran cómo la mirada de Dios y su brillo reflejado en los ojos de Jesús van cambiando vidas, promoviendo la conversión y la sanación espiritual de los que permanecen activamente en el radio de dicha mirada y se dejan transformar por ella. Este texto anima al lector a experimentar su propia realidad bajo la mirada de Dios, sugiriendo que este cambio de perspectiva nos convierte de espectadores pasivos a participantes activos, en un diálogo continuo con lo divino. Es una invitación a emprender un viaje interior a la escuela de los profetas y de los personajes evangélicos, dejándonos llevar en un proceso de salvación que tiene su origen en el amor de Dios y nos ayuda a descubrir el sentido profundo y verdadero de nuestra vida.

This book is a reflection on God's gaze and its power to transform our perception of ourselves and the world. Through narratives and examples from the Holy Scriptures, it shows how this gaze can be a true creative act, revealing unknown facets of our soul.

In the Old Testament, God's gaze is described as a transformative element, while in the New Testament, it is embodied in Jesus, reflecting love and compassion. The biblical stories illustrate how God's gaze and its radiance reflected in Jesus' eyes change lives, promoting conversion and spiritual healing for those who actively remain within its reach and allow themselves to be transformed by it.

This text encourages the reader to experience their own reality under God's gaze, suggesting that this shift in perspective transforms us from passive spectators to active participants in a continuous dialogue with the divine. It is an invitation to embark on an inner journey to the school of the prophets and evangelical figures, allowing ourselves to be guided in a process of salvation that originates in God's love and helps us discover the profound and true meaning of our lives.