The dark side of energy poverty: who is underconsuming in Spain and why?

Abstract

Los indicadores objetivos tradicionales de la pobreza energética se centran sobre todo en los hogares que gastan una parte desproporcionada de sus ingresos en energía. Sin embargo, las personas vulnerables también podrían restringir su consumo de energía y esta «pobreza energética oculta» no se tiene suficientemente en cuenta en las métricas y las políticas. Este documento investiga este fenómeno y propone una nueva metodología para determinar un umbral absoluto por debajo del cual el gasto energético real de los hogares es demasiado bajo para satisfacer sus necesidades energéticas. Posteriormente, se introduce un criterio de ingresos como variable sustitutiva para excluir a los hogares que tienen un gasto energético bajo por razones distintas a la falta de asequibilidad. Por último, este artículo analiza la sensibilidad de los resultados a las suposiciones realizadas para el umbral de gasto energético absoluto y el umbral de ingresos, presentando así un escenario alternativo «ajustado a la realidad». Los resultados del estudio de caso español muestran que, en 2019, 45% de los hogares tenían un gasto energético absoluto bajo, pero sólo 56% de ellos (25% del total de hogares) sufrían pobreza energética oculta. Además, la «brecha de pobreza energética» media anual por hogar era de 374 euros, y el presupuesto nacional necesario para cubrir potencialmente esta brecha era de 1.692 millones de euros. Por otra parte, existía una amplia disparidad regional en función de la climatología y los ingresos, y se han identificado varios factores clave, a saber, el tamaño del hogar, la eficiencia energética y la tenencia de la vivienda, y el grado de urbanización de la localidad. Por lo tanto, el análisis a nivel macro realizado en este trabajo permite caracterizar la pobreza energética oculta en España, y las recomendaciones políticas proporcionadas podrían guiar a los responsables políticos para orientar los programas de asistencia de manera más eficaz.

The traditional energy poverty ‘objective’ metrics are mostly focused on households spending a disproportionate share of income on energy. Nevertheless, vulnerable people could also restrict their energy consumption and this ‘hidden energy poverty’ is not sufficiently considered in metrics and policies. This paper investigates this phenomenon and proposes a new methodology to determine an absolute threshold below which households’ actual energy expenditures are too low to meet their required energy needs. Thereafter, an income criterion is introduced as a proxy to exclude households that have low energy expenditures for reasons other than lack of affordability. Finally, this article analyses the sensitivity of results to the assumptions made for the absolute energy expenditure threshold and the income threshold, thus presenting an alternative ‘adjusted to reality’ scenario. The results for the Spanish case study show that, in 2019, 45 of households had low absolute energy expenditures, but only 56 of these (25 of the total households) were suffering from hidden energy poverty. Besides, the average annual ‘energy poverty gap’ per household was €374, and the national budget needed to potentially fill this gap was €1,692 m. Moreover, there was a broad regional disparity depending on climatology and income, and several key factors have been identified, i.e. household size, housing’s energy efficiency and tenure, and locality’s degree of urbanisation. Thus, the macro-level analysis carried out in this paper makes it possible to characterise hidden energy poverty in Spain, and the policy recommendations provided might guide policymakers to target assistance programs more effectively.