Violencia de Género en la Gestación

Abstract

La violencia de género representa uno de los mayores desafíos sociales y de salud pública en nuestra sociedad contemporánea, afectando gravemente el bienestar y la salud de las mujeres a nivel mundial. Durante el embarazo, las mujeres enfrentan una mayor vulnerabilidad a esta forma de violencia, lo que conlleva riesgos significativos tanto para su salud como para la del feto en desarrollo. A pesar de que las mujeres gestantes mantienen un contacto regular con el personal sanitario durante el seguimiento prenatal, no se realiza un cribado sistemático de la violencia de pareja en este contexto. Es esencial fortalecer la formación y sensibilización de los profesionales de la salud que atienden a mujeres embarazadas para identificar y abordar precozmente la violencia de género durante esta etapa crucial. Este proyecto educativo está dirigido específicamente a enfermeras de atención primaria, proporcionándoles los conocimientos y recursos necesarios para detectar, prevenir y abordar la violencia de género en el embarazo. La implementación de protocolos y guías de actuación homogéneas permitirá una atención integral y oportuna a las mujeres que sufren violencia durante esta etapa, contribuyendo así a la protección de su salud y la de sus recién nacidos.

Gender-based violence is a significant social and public health challenge that affects the well-being and health of women worldwide. Pregnant women are particularly vulnerable to this form of violence, which poses risks to both their health and that of the developing foetus. Although pregnant women have regular contact with health workers during antenatal care, there is currently no systematic screening for intimate partner violence in this context. It is essential to strengthen the training and awareness of health professionals caring for pregnant women to identify and address gender-based violence early during this crucial stage. This educational project aims to equip primary care nurses with the

knowledge and resources to detect, prevent, and address gender-based violence during pregnancy. The implementation of standardized protocols and guidelines will enable comprehensive and timely care for women experiencing violence during this stage, thereby safeguarding their health and that of their newborns.