Comparativa sobre la estructura de redistribución de los países nórdicos y los países mediterráneos y su impacto en la pobreza y en la desigualdad

Abstract

El presente trabajo permite determinar si la estructura redistributiva de los países nórdicos es más efectiva que la de los países mediterráneos para reducir la pobreza y la desigualdad. A su vez, permite comprobar qué sistema redistributivo es más progresivo, equitativo y justo. Se analizan los sistemas fiscales de Suecia, Finlandia, España e Italia en los años 2016-2019 y su incidencia en cada decil de la población. Se detalla si estos gravan más a las rentas altas o a las bajas y si sus sistemas de transferencias destinan la mayoría de las prestaciones a los ciudadanos con los ingresos más bajos. Además, se presta especial atención a cómo cada componente de la renta disponible afecta a los índices de desigualdad y de pobreza. Se concluye que los países nórdicos logran unos menores niveles de desigualdad y pobreza al recaudar más beneficios de la población con mayores ingresos y realizar mayores transferencias a los más pobres. Los beneficios se recaudan no únicamente de los más ricos sino también de la clase media-alta. Se determina que el componente de la renta disponible más relevante para reducir la pobreza y la desigualdad son las pensiones públicas. Asimismo, se demuestra que los países no tienen porque tener unas retenciones progresivas para lograr una mayor redistribución.

The purpose of this paper is to determine whether the redistributive structure of the Nordic countries is more effective than that of the Mediterranean countries in reducing poverty and inequality. At the same time, it allows us to see which redistributive system is more progressive, equitable and fair. The tax-benefit systems of Sweden, Finland, Spain and Italy and their impact on each decil of the population are analyzed in the years 2016- 2019. It details whether they are more taxed on high- or low-income population and if their transfer systems allocate most of the benefits to citizens with the lowest incomes. Moreover, particular attention is paid to how each component of disposable income affects the inequality and the poverty rates. It is concluded that the Nordic countries achieve lower levels of inequality and poverty by raising more benefits from the highest-income population and making greater transfers to the poorest. The benefits are raised not only from the richest but also from the upper-middle class. It is determined that the most relevant component of disposable income to reduce poverty and inequality are public pensions. It is also demonstrated that countries do not need to have progressive retentions to achieve greater redistribution.